Cuatro pasos básicos
Es muy común caer en la queja: arrancamos con el marido y terminamos en el presidente de la nación. La hilación? La queja.
Y el mundo se vuelve negro, amargo, amenazante e irrespirable.
¿Qué pasó? Empecé a quejarme y no pude parar. Me acostumbré e hice de la queja un estilo de vida.
Me abracé a la QUEJA.
A todos nos ha pasado. Quedar atascados en este círculo vicioso.
Identikit de la queja | |
|
¿Te encontrás en un paisaje parecido?
Veamos cómo podemos salir de este estado tan desagradable:
Paso 1: Deja de quejarte
Intenta vivir todo un día sin quejarte. Luego una semana. Luego un mes. Ponete un objetivo. Seguro vas a ver cambios rápidos... el primero: sentirte mejor.
Paso 2: Revisate
Evalúa qué responsabilidad estás evadiendo al efectuar tus quejas: ¿para qué te quejas?
¿Qué cosas podrías hacer diferente?
¿Qué te lo impide?
Paso 3: toma acción
Hace los cambios necesarios, decí lo que necesites decir a quién corresponda: si, no....
Paso 4: mantenete alerta
Es muy importante saber con la facilidad que podemos caer nuevamente en el círculo de la queja.
Es necesario estar atentos a cada pensamiento y palabra que emitimos para lograr controlar el deseo irrefrenable de quejarnos porque Sí.
Esto es sólo el comienzo. En la práctica de cada paso vas a encontrar tus propias respuestas.
Gracias por leerme.
¡Buen viaje!
No hay comentarios:
Publicar un comentario