jueves, 19 de enero de 2017

Rol del Coach


El Coaching Ontólogico está basado en el entrenamiento del Ser.

Ese Ser que somos pero también en aquel que podemos llegar a ser, es decir, en las posibilidades, en ese múltiple abanico que se abre cuando nos permitimos corrernos del lugar en el que estamos: a veces estamos en el dolor, en el resentimiento o en el triste papel de victimas; somos simples espectadores de esa película que no para y es  “la vida”.
Como seres humanos tenemos el derecho de ser Protagonistas, y eso,  es una elección que siempre está disponible.
Las creencias, las costumbres pueden operar cómo límites a nuestros profundos deseos de cambiar; pero ante todo: la creencia de que es el “otro” el que está mal, el que “tiene que cambiar”, el  afuera está mal. Y si, sépanlo amigos, el otro puede estar muy errado, o lo que sea que pensemos, pero la única posibilidad de cambio real está adentro, en NOSOTROS MISMOS.
Empezar por “casa” es la mejor opción para la verdadera transformación.

Y el primer paso del coach es apoyar al consultante, guiarlo para que pueda correrse del cómodo lugar que ocupa, y se pueda preguntar cosas que nunca antes se preguntó y PONGA EN DUDA SUS CERTEZAS. Habrá muchas que le servirán para el equipaje, pero muchas otras ya no será necesarias.

Este proceso se llama APRENDIZAJE, y el coaching es, como llamó Julio Olalla “el arte de crear espacios de aprendizaje”.

Es un proceso dinámico e interactivo que consiste en asistir a otros en el logro de sus metas, colaborando en el desarrollo de su propio potencial, logrando un nivel de desempeño que hoy no tienen.
Es un aprendizaje  transformacional  mediante el cual las personas y organizaciones revisan, desarrollan y optimizan sus formas de estar siendo en el mundo.

El coach es un facilitador del aprendizaje, que acompaña al otro en una búsqueda de su capacidad de  aprender para generar nuevas respuestas a situaciones que enfrenta en los diversos ámbitos de su vida”.  A través de conversaciones,  cuestiona las estructuras rígidas de nuestra forma particular de ser y de cómo deben hacerse las cosas
El coach ontológico no le dice a las personas lo que tienen que hacer, no presiona, no juzga, no interpreta  ni aconseja.

Explora, hace preguntas, desafía respetuosamente los modelos mentales del coachee (cliente), mirada que permite el descubrimiento de nuevas acciones. 
Opera en el dominio del lenguaje y la conversación además de los dominios corporal y emocional
El coach ayuda al coachee a mirar hacia su interior y tomar mayor conciencia de sí mismo, para saber cuáles son las fortalezas y las limitaciones.
Descubrir lo que quiere, lo que teme, los bloqueos,  lo que lo motiva, el propósito y la misión.
¡Qué tengas un excepcional fin de semana!


Gracias por leerme!


Ser responsables

La habilidad de responder

Fredy Kofman se pregunta por qué las personas tendemos a actuar cómo victimas de nuestras circunstancias...si hacerse responsable es más efectivo que desligarse del problema.

En respuesta a ese interrogante, expone algunas razones:

  1. Porque creemos que la seguridad y la felicidad se consiguen mediante la aprobación del otro; y
  2. porque creemos que el bienestar y el éxito se derivan de la inocencia y el complacer a los demás.

Nos han enseñado desde pequeños a igualar responsabilidad con culpabilidad. Crecimos creyendo que ser responsables equivale a “ser culpables o causantes” de algo. Y ser culpables es algo malo. Defendemos nuestra inocencia despegándonos del problema. Pero si uno no es parte del problema, tampoco será parte de la solución.
Aun cuando no seamos los agentes causales en forma directa del problema, podemos ser parte del sistema que genera el resultado insatisfactorio.
Siempre que uno sufre, “tiene algo que ver” con el asunto.

¿Cuál podrían ser, entonces, la clave para cambiar la actitud frente a los desafíos diarios?

La autorresponsabilidad es la respuesta.

Soy responsable de mis elecciones y acciones.
Soy responsable del modo en que utilizo mi tiempo.
Soy responsable del nivel de conciencia que aplico a mi trabajo.
Soy responsable del cuidado o la falta de cuidado con que trato a mi cuerpo.
Soy responsable de mantener las relaciones que decido entablar o en las que elijo continuar.
Soy responsable del modo en que trato a los demás: Mi cónyuge, mis hijos, mis padres, mis amigos, mis socios, mi jefe, mis subordinados, el vendedor de una tienda.
Soy responsable del significado que doy o dejo de dar a mi existencia.
Soy responsable de mi felicidad.
Soy responsable de mi vida en lo material, lo emocional, lo intelectual y lo espiritual.

No es mi intención sugerir que una persona nunca sufre a causa de un hecho accidental o por los fallos de los demás, o que es responsable de todo cuanto pueda sucederle.
No somos omnipotentes.
Sobre algunas cosas tenemos control, sobre otras no. Si me hago responsable de asuntos que están más allá de mi control, pondré en peligro mi autoestima, ya que, inevitablemente, no lograré alcanzar mis propios objetivos. Si niego mi responsabilidad en cuanto a cosas que sí están bajo mi control, nuevamente pongo en peligro mi autoestima. Necesito saber la diferencia entre lo que depende de mí y lo  que no. También necesito saber que soy responsable de mi actitud y mis acciones relacionadas con aquellas cosas sobre las que no tengo control, como la conducta de otras personas.
Como verán, la responsabilidad, vista como una habilidad para responder frente a las circunstancias, abre un abanico de posibilidades, pero nunca nos deja afuera, el poder sobre la propia vida, lo tiene uno mismo. Saber esto, es liberador, aunque implique pasar por situaciones que nos incomoden.
En definitiva, ser responsables nos abre las puertas del aprendizaje y crecimiento continuo.

En los próximos artículos seguimos ahondando sobre este tema que no se agota en sí mismo.

Ojala te sume saber lo MUCHO que depende de VOS.

Gracias por leerme y ¡buen viaje!

Fuente: Metamanagement, Fredy Kofman. Cómo mejorar su autoestima, Nathaniel Branden

 ¿Por qué las personas actuamos como victimas en lugar de actuar como protagonistas?





viernes, 6 de enero de 2017

Amistad sin Condiciones

Empezar por mí

“Me odié a mi misma y no fui correspondida”.
Virginia Gawel

Esta época, donde además de vacacionar, descansar, desconectar, cargar pilas; también puede ser un tiempo de pensarnos a futuro, de plantearnos metas, posibles caminos, decisiones.
Y es genial hacerlo, porque conectamos con aquello que queremos lograr, que queremos sentir, nos motiva, nos llena de energía.
Por esa razón creo propicio hacer referencia a algo que está por debajo de todo eso...y es nuestra relación con nosotros mismos. Es importante saber que “estar en equilibrio” con nosotros, tener una relación profunda, optima y sana nos permite caminar nuestro presente “de otra manera”.

El modo en que nos relacionamos con quienes somos determina cada paso de la vida: cada elección, cada hábito, cada vínculo, cada proyecto, cada concreción. Y también el monto de dolor o de bienestar que vayamos experimentando a medida que desplegamos nuestra identidad.

En Occidente lo más común es que las personas oscilen entre distintas formas de auto maltrato, partiendo de un rechazo hacia sí misma que trae consecuencias en cada área de su vida. No se trata de un problema de "autoestima". Se trata de algo mucho más profundo: la transformación de hábitos autorrelacionales que uno puede aprender a observar, a desactivar y a transformar desde lo más hondo, con la ayuda del propio Inconsciente.

De esto se trata la práctica de "Maitri" (término que en la Psicología Budsita se traduce como "Amistad incondicional consigo mismo).

He observado en muchos de los cursos de autoestima que he impartido que:
  • La falta de auto respeto nos impide poner límites
  • La ausencia de amor hacia uno mismo trae falta de confianza, y si no creo en mí ¿quién lo hará? ¿cómo avanzo?
  • El auto saboteo hace que dejemos casi todo a medias, y eso trae aparejado la pérdida de poder sobre nuestra vida
  • El auto maltrato nos afecta directamente en el estado de ánimo y en el tipo de relaciones que tenemos
Este nuevo concepto de amistad incondicional conmigo mismo, da un paso más, ahonda en la relación con la persona más importante de tu vida: VOS
Y como creo fervientemente que si empezamos por nosotros, “la cosa puede funcionar”, quiero invitar a todos los lectores (que tengan ganas de empezar por casa) a ser parte de una nueva experiencia.
Se trata de un servicio gratuito por mensajería instantánea (WhatsApp) destinado a trabajar sobre tips, prácticas y material que apoye el “aprender a querernos mejor”.
A través de un grupo privado de personas estaríamos practicando día a día diferentes maneras de enriquecer la auto valoración que cada uno tiene de sí mismo, entre otras cosas.

La invitación está hecha, destinada a hombres y mujeres.
Todo aquel interesado en formar parte del grupo, puede ponerse en contacto al número que figura más abajo.

La fecha de inicio de actividad del grupo será el lunes 16 de enero.

¡Los espero!

Fuente: Virginia Gawel, Lic en Psicología.

La persona más importante de tu vida sos VOS